Una más para el sureste mexicano

Al parecer las tragedias han venido para permanecer en el territorio mexicano. La tarde de hoy viernes se suma una que será noticia negativa para el sur-sureste, principalmente para Tabasco y Veracruz. La caída de parte del puente que comunicaba estos dos terruños sobre la superficie del río Tonalá es una desgracia para agregarla a la historia que día a día se escriben.

Hasta este momento aún no se tiene un número exacto del número de personas que perdieron la vida en el citado accidente, pero al parecer serán varias las víctimas que en mal momento y lugar se encontraban. Este no es el primer acontecimiento de este tipo, ahora falta ver cuáles serán las explicaciones que las autoridades tanto estatales, municipales y federales darán sobre este lamentable hecho.

Y no importan tanto las explicaciones que den, pues al final de cuenta sólo son palabras, demostrando con sus acciones que no son capaces de hacer su trabajo. De qué nos sirve pagar tantos impuestos, confiando en que por lo menos una parte se destine a vigilar por la ciudadanía y no sólo en altos salarios para los dizque gobernantes que hoy ocupan ciertos puestos.

Lamentablemente las autoridades se han ocupado en prioridades que ante la ciudadanía quizá no poseen tanta atención, pero ante cuestiones de seguridad, empleo, salud, por mencionar, pareciera que no se le está dando una acertada importancia.

Este año es electoral en Tabasco, y este acontecimiento puede ser un importante indicador para la ciudadanía del cómo evaluar el desempeño de los gobernantes, y analizar si se le puede seguir confiando nuestra seguridad a los mismos de siempre, o bien, darle una oportunidad a otras alternativas para ver si ellos sí pueden garantizar las cuestiones básicas que permitan vivir en mejores condiciones.

Ya basta a la corrupción...Es necesario un cambio y con urgencia. Y es momento de que la SCT analice si sus titulares están realizando el trabajo adecuado, pues al final de cuentas, quienes terminamos pagando somos los menos afortunados, como las víctimas del desplome del Puente Tonalá I.